Ejercicio de Mindfulness (La pasa)

En un articulo anterior hablamos de Mindfulness el cual si es la primera vez que lees sobre esto te interesa leerlo, Mindfulness sirve para mejorar nuestra atención, esta es un musculo que debe de entrenarse continuamente, esta practica cuanta con mas de 2500 años de antigüedad pero sin embargo no llega hasta nosotros los accidentales hasta hace solo 30 años, la técnica se utiliza para calmar dolores, reducir el estrés, hoy en día Mindfulness se utiliza en todos los campos, en educación, empresas y en el ámbito personal.
Un estado de atención consciente ayuda a ser mas creativos y a poder valorar las situaciones con una mayor claridad, también ayuda a reducir la ansiedad y reducir el estrés
También nos ayuda a aumentar la resistencia emocional y a disfrutar mas de lo que se esta haciendo.
Crear nuestro gimnasio de Mindfulness como en todos los deportes se requiere de un poco de dedicación para empezar con los ejercicios, y empezar a ganar mas cuotas de atención necesitamos emplear entre 5 a 30 minutos al día para expandirlos limites de nuestra atención.
Comenzamos con este ejercicio que podemos repetir cuantas veces queramos, lo importante de estos ejercicios es la practica.
Ejercicio Mindfulness La Pasa
Es un ejercicio muy popular y empleado en talleres de Mindfulness de todo el mundo.
Es un ejercicio muy simple para empezar el ejercicio necesitamos de una pasa de uva que podemos encontrar fácilmente en los supermercados.
Cogemos la pasa y observamos con detalle a la pasa nos centramos en sus colores y tonalidades, el índice de luz de la pasa la ponemos a trasluz y nos fijamos en sus propiedades o texturas rugosas.
Tratamos de ver o captar todas las propiedades de la pasa.
Cerramos los ojos y mediante el tacto empezamos a captar toda la información de la pasa tratamos de captar todo lo que no se pueda ver.
Empezamos a tocar la pasa con mimo, deslizándola por los dedos, para darse cuenta de los relieves y como se desliza la piel de la pasa por la nuestra.
Nos introducimos la pasa en la boca con los ojos cerrados todavía, no mordemos la pasa, la acariciamos con los dientes para notar como cae en nuestra boca cuando cae en nuestra lengua empezamos a explorar la pasa como hemos hecho con los dedos sin prisas nos tomamos nuestro tiempo de exploración, disfrutando en todo momento de todo los que una significante pasa nos puede ofrecer.
Mordemos la pasa y somos conscientes que se produce un cambio en nuestros sentidos, empezamos a percibir el sabor, como se funde y mezcla con el nuestro con la saliva y el gusto, tratamos de llenarnos toda la boca con la mezcla de sabores llegando a todos los rincones con el sabor de la pasa.
Cuando tengamos toda la boca con el sabor de la pasa, podemos tragarnos la pasa y abandonar la boca y notamos como pasa por nuestra garganta y se integra en nuestro interior.
Una vez terminado el ejercicio esperamos unos minutos para abrir los ojos.
Lo principal del ejercicio y la moraleja del ejercicio es haber disfrutado de la pasa y celebrar este momento de disfrute de la pasa, en lugar de engullir la pasa lo que hemos hecho es disfrutar de ella, le hemos sacado todas las posibilidades que tenia para ofrecernos esto es lo que ocurre en la vida, las prisas o la falta de atención, no nos permite disfrutar de todo lo que nos ofrece, y no dejamos que nos dé todo lo que tiene para ofrecernos.